domingo, 24 de noviembre de 2013

Una autovía en el jardín de casa - "Antes nos poníamos las madreñas para ir al pueblo, ahora dependemos del coche", denuncian los vecinos de La Xiralda, aislados por la autopista a Grado.



FUENTE: LA NUEVA ESPAÑA - (24/11/2013)

El prado de la finca La Xiralda, en la localidad del mismo nombre de Santa Marina de Piedramuelle, está dividido por una autovía. En un lado está la casa y en el otro su antiguo pozo, en un terreno perfecto para el ganado. Pero hace ya una década que las vacas no pastan allí y que nadie saca un cubo de agua. El Ministerio de Fomento cortó el suelo por lo sano y construyó la A-63 después de expropiar más de 1.000 metros cuadrados del lugar. Los propietarios se quedaron con la finca partida en dos y al resto del pueblo le pasó lo mismo. Sólo la promesa de una pasarela peatonal les hizo ver con buenos ojos la nueva unión por carretera entre Oviedo y La Espina. Sin embargo, a día de hoy, los cerca de 600 vecinos de Santa Marina de Piedramuelle siguen sin poder atravesar el pueblo andando y Violeta Fernández, que vive en La Xiralda, ha perdido la cuenta del tiempo que hace que no pisa "su otro trozo de finca".
Uno de sus familiares, el joven Sergio Huerta, preside la Plataforma Vecinal Santa Marina de Piedra Muelle, con el objetivo de defender los intereses de la localidad. "No es justo que llevemos diez años separados por una autovía y que ninguna Administración nos dé una solución. El Ayuntamiento y el Principado se pasan la pelota para reclamar al Estado que nos haga la pasarela que nos prometió hace una década", explica.
El ancho de la A-63 es de diecisiete metros, pero los vecinos de Santa Marina de Piedramuelle tienen que coger el coche y dar un enorme rodeo si quieren ir de un lado a otro. El centro social, el cementerio o la iglesia están en la misma zona, por lo que aquellos que viven enfrente -en las poblaciones del Picu Ural o El Trigal- deben ir por carretera para reunirse, ir a un funeral o acudir a misa.
"Muchos vecinos tienen una edad avanzada y dependen de sus familiares para moverse por el pueblo, cuando antes se calzaban las madreñas y ya está", comenta el joven Huerta, que pide "la unión de las Administraciones".

No hay comentarios:

Publicar un comentario